26 de maig, 2011

Un día como cualquier otro

Salimos de un buen
restaurante, en teoría,
las 3de la noche,
muy caro, mucha bebida,
quesos y poco más,
y dirección a casa
un tráiler y un coche
ocupando las 2 calles
y en medio una chica
inmóvil en el suelo
medio muerta.

Damos media vuelta
dándoles esquinazo
y nos fuimos a la cama
por el camino más largo.