Cosas ya pasadas

A Goytisolo

A veces alguien grita tu nombre,
alguien de quién no te acuerdas,
de hace ya muchos años,
y al darte la vuelta te alegras.

A veces ves una foto de un amor ya pasado
que te da muy buenos recuerdos.

A veces das un bocado a un pollo de restaurante
y sabe igual que el que tanto te gustaba de pequeño
y olvidaste por completo.

A veces ves jugar a los niños
y te da envidia,
e imaginas aquella cabaña que construiste con tu vecino
y que luego otros gamberros destrozaron.

A veces las mascotas que corren
se mueven como la tuya,
ya muerta.

A veces ves como una chica llora
y te hace pensar
en tus malos momentos.

A veces cuando haces el amor
recuerdas como era exactamente
tu primer visionado porno.

A veces te ocurre algo inesperado,
que identificas de inmediato,
y que es exactamente
la secuencia de tu película favorita.

A veces se muere alguien,
eso pasa más a menudo de lo que debiera.

A veces pierdes tu orgullo
y merece la pena.

A veces sales a la calle
y no hay ni una alma en pena,
eso también te suena.

A veces conoces a un hombre
que acaba siendo tu mejor amigo.

A veces compras cualquier cosa
para sentirte acompañado
o porque estás acomplejado.

A veces piensas en golosinas,
eso sí que es una cosa dulce.

A veces tienes tiempo libre
y te sientes como en la hora del patio.

A veces escupes en la orilla
para no hacer otra tontería
aún mayor o peor.

A veces salen unas nubes
que te permiten sacar una buena foto.

A veces miras el teléfono
y empieza a sonar.

A veces caen las hojas
sin pedir permiso.

A veces te enamoras
y nunca se lo dices.

A veces te meas encima
y, sin preocuparte,
te quedas dormido.

A veces no te sale la frase.

A veces caes en la misma trampa,
en la que todos hemos caído.

A veces no sale la luna,
será que algo hemos perdido.

A veces la decepción
llega antes de lo que esperas.

A veces sería mejor que las esperanzas
no estuvieran expuestas.

A veces quién tiene el don de la palabra
pierde la fuerza.

A veces, sólo a veces, sale el sol.

Y a veces hay esas cosas que valen la pena,
están por allí sueltas
y en algún lugar crecen y mueren.