14 de març, 2008

Amor por 16,25 EUR

Allí la vi por primera vez.
De pie, con su vestido rojo
y sus gafas.
Inmóvil.

Sólo ella podía ser
la mejor amante.

Sin llevarla a fiestas,
ni a pasear,
ni a comprar,
ni a estúpidos cines
con estúpidas películas.

Sin discusiones,
sin mentiras.

Entré y pregunté:
¿Está en venta?
Luego salí.

Había conseguido
mi maniquí.