03 d’octubre, 2007

El bueno de Noe

Noe era demasiado bueno.
Otros mucho más justos

y menos magnánimos
hubieran prescindido,
en su momento,
de la mayoría de los animales.

Si hablamos de hoy en día,
por ejemplo,
aún es más fácil
hacer una buena tría.

No hay nadie
que merezca entrar en la balsa.