23 d’octubre, 2007

Políticos

Los políticos son seres bien extraños.
Siempre tan impolutos,
sin subir de tono su voz monótona,
ni expresarse vulgarmente mediante insultos,
como hacen la mayoría de las personas normales.

Sus familias están hechas a medida,
son dignas de imitación,
tan correctas, tan perfectas
a nuestros humildes ojos.

Sus asesores de imagen son
como niños jugando
con aquellos recortes de papel
que simulan distintos trajes.

Cuando interesa no aparentar,
pegan el traje del campesino
con sombrero de paja y cesta en mano,
si se trata de un mitin se escoge uno más formal
y si es una cena con la realeza
se opta por el que parece más caro,
que para eso están los contribuyentes.

No falta nunca, claro, el disfraz de bañista,
es el único que se parece un poco
al utilizado por los ignorantes votantes.

Cuando a uno lo elijen presidente
se le entrega una casa a lo Pin y Pon
o a lo Ken y Barbie en su mansión
con todo tipo de lujo,
aunque de esas, hoy en día
ya casi ni existen,
no sé donde las encuentran.

Elegantes, pasan el tiempo inaugurando nimiedades,
yendo de cena en cena sin pagar
y eso sí, que las vacaciones no falten,
que para estas cosas, todos somos iguales,
aunque haya la pequeña diferencia
de que ellos las tienen bien pagadas.

Saben cuando hay que hablar
y cuando hay que callar,
sobre todo cuando ignoran la respuesta
a la que acostumbra a ser la mejor pregunta.

Se preocupan mucho por sus votantes,
básicamente cuando se trata de sus hijos,
y les colocan con maestría en trabajos envidiables.
¡Qué arte el suyo!

Y cuando finalmente,
alguien piensa un poco en los resultados,
después de tantos años,
se da cuenta que da lo mismo
de qué partido venga el político.

Todos son mierdas,
puras mierdas que sólo procuran
engordar más sus propios traseros,
y eso que dicen que engordar es perjudicial.

Los políticos son seres bien extraños.
Andando sin corazón,
hablando sin cerebro,
soltando solo tonterías.

Aunque también son bien extraños
aquellos que sabiendo todo esto
aún se atreven a ir a votar a alguno de ellos.